La falta de tiempo suele ser el principal motivo para decantarse por delegar la organización de una boda. No obstante, esta alternativa es aconsejable para cualquiera, dado que contar con un wedding planner no solo propiciará una mejor programación de la ceremonia y el festejo, sino que ayudará también a los contrayentes a aplacar los típicos nervios previos al enlace, dado que podrán disfrutar al máximo tanto de los preparativos de su enlace como de la propia celebración. No en vano, tendrán la certeza de que cualquier imprevisto estará contemplado y de que el profesional que se ocupa de asesorarles sabrá cómo solventar cualquier eventualidad.
Es por ello que, para ocuparse de la planificación de este tipo de eventos, es preciso contar con múltiples recursos, lo que implica conocer a fondo todas las particularidades que los definen, independientemente de las preferencias, culturas y creencias de los novios, ya que solo de este modo será factible planificar adecuadamente el calendario de preparativos de cara a que el día de la boda ningún detalle quede al azar y a que siempre exista una alternativa para dar respuesta a contingencias sin que el esquema programado se vea notablemente afectado.
El wedding planner, por tanto, ha de sumar a sus conocimientos en la materia las competencias necesarias para contar siempre con una opción en la recámara, a fin de satisfacer plenamente las necesidades de los contrayentes. Y, para lograrlo, además, ha de estar altamente capacitado para identificar cuáles son sus gustos y preferencias, algo para lo que ha de desarrollar sus habilidades comunicativas, a fin de obtener un feedback altamente provechoso, que le permita sorprender gratamente a los novios con cada detalle.
Esta profesión está muy afianzada en otros países, como Estados Unidos y Reino Unido, donde esta figura es clave a la hora de organizar una boda. Y, aunque es aún joven en España, la demanda de expertos en organización de este tipo de eventos es cada vez mayor. Por tanto, para dar respuesta a la misma, cada vez son más los profesionales que, procedentes de áreas ligadas a la planificación de otro tipo de eventos, al protocolo, a la decoración de festejos temáticos, etcétera, se han decantado por mejorar sus conocimientos de cara a especializarse en este ámbito, algo imprescindible dado que cada uno de celebración requiere un tratamiento y planificación diferentes; por tanto, trabajar como wedding planner exige contar con las herramientas necesarias para la correcta materialización de la ceremonia y los festejos proyectados en torno a la misma. Y, de ahí, este curso en el que se aportará al alumno una visión global acerca de todos aquellos aspectos a tener en cuenta, a fin de que conozca sobradamente las claves a considerar y sea capaz de proyectar un calendario adecuado para que los futuros contrayentes disfruten del mismo y afronten con seguridad y confianza su gran día.
A medida que avance en la materia de este curso, el futuro wedding planner conocerá en profundidad los principales aspectos a tener en cuenta en la organización de una boda y descubrirá:
Este curso está pensado para satisfacer las necesidades formativas de personas que gusten de planificar eventos o que aspiren a desarrollar una carrera profesional en sectores vinculados a la organización de bodas.