La aparición de las primeras directivas europeas para la protección y seguridad en atmósferas explosivas se concretó en una primera apuesta por cotribuir a favorecerla. No obstante, y aunque a esas legislaciones han seguido también otras de carácter estatal, lo cierto es que todavía podemos encontramos con situaciones en las que no se han implantado o se materializan de forma incorrecta las normas aplicables en este terreno. Las razones obedecen a causas tan diversas como el desconocimiento, la falta de toma de conciencia de estos riesgos y, sobre todo, el anquilosamiento de la normativa o de las acciones preventivas requeridas. La principal consecuencia de esto es que la vida de personas y la seguridad de instalaciones peligra.
Para contribuir a evitarlo, el Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo, de acuerdo con lo dispuesto en el artículo 5.3 del Real Decreto 39/1997, de 17 de enero, por el que se aprueba el Reglamento de los Servicios de Prevención, tiene entre sus cometidos el relativo a la elaboración de Guías destinadas a la evaluación y prevención de los riesgos laborales, a fin de proporcionar criterios y recomendaciones que pueden facilitar a los empresarios y a los responsables de prevención la interpretación y aplicación del citado Real Decreto, especialmente en lo que se refiere a la evaluación del riesgo por presencia de atmósferas explosivas y en lo que concierne a medidas preventivas y de protección aplicables.
Se define como atmósfera explosiva a la mezcla con el aire, en condiciones atmosféricas normales, de sustancias inflamables en forma de gases, vapores, nieblas o polvos, en la que, tras una ignición, la combustión se propaga a la totalidad de la mezcla no quemada.
El Real Decreto 681/2003, de 12 de junio, sobre la protección de la salud y la seguridad de los trabajadores expuestos a los riesgos derivados de atmósferas explosivas en el lugar de trabajo, encomienda al Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo, la elaboración y el mantenimiento actualizado de una Guía Técnica, de carácter no vinculante, para la evaluación y prevención de los riesgos relacionados con las atmósferas explosivas que puedan formarse en los lugares de trabajo. Y lo hace de manera específica, en su disposición final primera.
Este Real Decreto, al igual que el RD 400/1996, desarrolla las directivas europeas en las que se hacía alusión a la regulación de aparatos, sistemas de protección y prevención de riesgos para trabajadores que operen en espacios con probabilidad de atmósferas explosivas.
El desarrollo normativo establece una serie de obligaciones del empresario con objeto de prevenir las explosiones y de proteger a los trabajadores contra estas. Y dicha normativa conlleva algunas obligaciones específicas, como la clasificación en zonas de las áreas de riesgo, las características específicas que deben cumplir los equipos instalados o introducidos en las zonas clasificadas y la obligatoriedad de recoger todos los aspectos preventivos que se hayan desarrollado en la empresa en un documento de protección contra explosiones, sin que ello implique la duplicidad de la documentación ya elaborada en virtud de la Ley 39/1995 de Prevención de Riesgos Laborales.
Por tanto, teniendo en cuenta estas obligaciones, nuestro curso básico de ATEX (Atmósferas Explosivas) satisfará las necesidades formativas en la materia de ingenieros, químicos, técnicos de prevención de servicios de prevención propios y ajenos; gerentes, directores o responsables de empresas con atmósferas explosivas y a todo profesional que desempeñe actividades relacionadas con la seguridad, el mantenimiento y control de atmósferas explosivas en empresas de múltiples sectores con fuentes potenciales de ignición y en las que se desarrollen actividades de almacenamiento de combustibles, explotaciones mineras, estaciones de servicio de carburantes, industria de la madera, alimentación, etc.
Asimismo, es adecuado para responsables de explotación de plantas industriales, jefes de mantenimiento, responsables de oficinas técnicas, profesionales de mantenimiento mecánico y eléctrico, técnicos de operación de plantas industriales y responsables de producción.
El alumno de este curso aprenderá a:
A todo profesional que desempeñe actividades relacionadas con la seguridad, el mantenimiento y control de atmósferas explosivas en empresas de múltiples sectores con fuentes potenciales de ignición.